la estepa florecida

Ana Lafferranderie

Hablo sin dirección y de a ratitos callo
mientras el aire impacta la ventana.
Escucho algo deslizarse en la terraza,
mis pensamientos
asoman breves, la inquietud los cohíbe

de pronto sé
es una de esas tardes
una espiral volviendo a sus inicios
la forma recelosa de saberse perder,
nada
se hará concreto excepto recordar
que el más pequeño movimiento es tiempo.